Si soy sincera, ahora, más bien ver con dificultad. Es lo que tienen los ojos operados, un día ves bien, al siguiente borroso, al otro doble, unas horas mejor, otras peor... en fin, todo sea por amanecer un día y decir... ¡¡¡qué fuerte, VEO!!! y sin quedarte dormido con las lentillas puestas, je. Una amiga mía me contó que un domingo, después de una gran farra, se despertó y pensó que se había obrado el milagro y veía sin necesidad de lentillas. Se levantó de la cama gritando: "¡¡Mamá, milagro, milagro, que veo...!!" Su madre le contestó, Mamen, hija, quítate las lentillas que te habrás quedado dormida con ellas. En efecto.
Bueno, pues dentro de unas semanas, mis ojitos decidirán dejar de fluctuar y se obrará el milagro. De momento todavía tengo los ojos doloridos o molestos, así que la sensación de volver a ver todavía no la tengo, más bien la de llevar unas lentillas un poco viejas... pero bueno, we have to keep faith!! that'a all. Y mientras tanto, colirios, lágrima artificial y descanso relativo.
Salud y buen tiempo, ponis del mundo.
¿Jara, por qué siempre nieva cuando no estamos en Soria y vuelve a nevar cuando nos vamos? seguro que tiene la culpa el alcalde...
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